I. BUTTERFLIES. BUTTERDIED
durante la mañana aparecen muchas mariposas a nuestro alrededor . naranjas, azules, blancas y amarillas. revolotean erráticas, sin -aparente- rumbo fijo. algunas se posan en el mola, la mayoría siguen su camino. de dónde vienen estas mariposas ? a dónde van?no sabemos, pero poco a poco descubrimos como la superficie del mar se llena de mariposas muertas, parecen petalos de flor flotando en el agua...
navegamos a motor -snif snif-, con mayor y génova atangonado a la contra, viento ligero del NNE.
II. DELFINES
durante la tarde nos acompañan los del fines en varia ocasiones y durante largo rato. ¡¡ gran acontecimiento en el Mola!! primero, recibimos la visita durante una media hora aproximadamnte de un grupo de delfines mulares o bottlenose(nariz de botella) que son muy grandes, en comparacion con los delfines manchados tropicales que vinieron despues, haciendo muchas piruetas y acompañados de sus crias, todo un espéctaculo, que disfrutamos en sesion doble porque volvieron cuando se ponia el sol, creando un ambiente mágico de luz y vida...y de silencio, porque por fin podemos apagar el motor, navegamos a vela, con mayor a tope, genova a la contra y el piloto de viento haciendo su trabajo a la perfección...
III. RIDERS ON THE STORM
ya oscurece, y los delfines se alejan, dejandonos esa sensación tan especial y dificil de describir que dejan siempre sus visitas.... poco a poco todo a nuestro alrededor se vuelve negro, salvo un puntito de luz por babor, que son las luces de navegacion del Pannikin (http://www.sailblogs.com/member/pannikin/?xjMsgID=333761) un velero que ha ido más o menos a la par toda la travesía. De pronto, comenzamos a ver los destellos de una tormenta a unas 13 millas por babor, en tierra. Navegamos de nuevo con motor, con viento del SE. vamos controlando la tormenta en el radar, parece que se mantiene estable a esa distancia, afortunadamente. Nos preguntamos si la tripulación del pannikin sentira la misma tensión que nosotros, suponemos que si, que es inevitable, que solo quieres cabalgar y cabalgar lo más rápido sobre el mar y alejarte de la tormenta. aunque por suerte navegamos cerca uno del otro, y eso nos hace sentir mejor. Si hay tormenta y estas en casa, da gusto estremecerse en el sofá cuando los truenos hacen retumbar hasta las ventanas, enroscas un poco má los pies bajo la manta, y ese simple gesto parece que aumenta tu nivel de seguridad. te sientes protegido bajo el techo de tu hogar. pero, navegando en mitad de la noche, y en mitad del mar, te sabes muy insignficante, poquita cosa, .....y, aunque no puedes dejar de disfrutar del imponente espectáculo desde la bañera, te sientes muy vulnerable, calculas constantemente a las millas que esta, que direccion lleva y te preguntas xq carajo los palos de los barcos no son enrrollables como las velas para poderlos quitar en una situación así....al menos a mi, con mi poca experiencia con tormentas, me aterra que caiga un rayo en el barco.
IV. PERILLA EN MANO
Afortunadamente dejamos la tormenta atras, Edu se echó a descansar y comenzó mi guardia. a los 10 minutos, noto que se desacelera el motor, rapidamente voy hacia la palanca para ponerlo en punto muerto, edu se levanta de un brinco,- "paralo!! - grita; En lo primero que pensamos los dos es que se nos ha enganchado algo en la helice. Miramos con la linterna por popa, y no vemos nada. De pronto, se apaga el motor. Volvemos a ponerle en marcha, y lo mismo: se va desacelerando, va tosiendo, hasta que se apaga. -"Mierda!! xq estas cosas siempre pasan por la noche''- parece que entra aire al circuito del gasoil. Edu purga el circuito y aprieta todas las arandelas. Volvemos a intentarlo, esta vez ni siquiera hace ruido, ni se enciende la luz del motor. -"y ahora que pasa"- decimos desesperados; Pues que se ha fundido un fusible. Lo cambiamos arrancamos y...funciona!! pero a los diez minutos, de nuevo se desacelera....nuestro gozo en un pozo. No hay viento suficiente para ir a vela, tenemos que ir a motor, asi que la unica solución es apretar la perilla del gasoil cada 7-8 min para bombear cobustible y que no se pare. Asi pasamos nuestras respectivas guardias el resto de la noche, en plegaria, de rodillas en el motor ordeñando la perilla....cada 7 min....
V. Y SE HIZO LA LUZ
Empieza a clarear, estoy descansando y siento que el motor se apaga...- "otra vez no!!"- pienso, pero había sido Edu, que aprovechando la brisa de la mañana del E, nos hizo navegar a vela. cuando salgo fuera, contemplo el paisaje fascinada: navegamos muy cerca de la costa, y ahi mismo, al borde del mar, se alza imponente la cordillera de la Sierra Nevada..... impresionante. Por fin llegamos a la bahia de sta marta. fondeamos en 2m de profundidad entre la marina y los barcos de pescadores. A descansar, olvidarse de la perilla y soñar con delfines y mariposas....
No hay comentarios:
Publicar un comentario